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Fecha: 22/04/2016
Horario: 23:00

Concierto de Jacobo Serra en Santiago de Compostela

Concierto de Jacobo Serra en Santiago de Compostela.

Jacobo Serra o la belleza emergente del iceberg Jacobo Serra es un cantautor prolífico que va regalándonos sus canciones poquito a poco. Cuando se estrenó con un EP (The Word I Never Say, 2013), aquellas escuetas cuatro canciones ya hacían imposible la indiferencia. Luego llegarían en 2014 las diez composiciones de su debut, Don’t Give Up, y no quedó más remedio que extraer conclusiones urgentes. Por ejemplo, que Jacobo es una rara avis de nuestro panorama, un albaceteño formado en el Reino Unido y afincado en Madrid que bien podría aunar Liverpool, Nueva York, Chicago y Nashville en su código genético. Que escribe melodías tan imperecederas que podrían haber nacido en esta era del WhatsApp o en torno a la llegada del hombre a la Luna, como si llevaran cuatro décadas y pico suspendidas en el éter a la espera de que algún sabio cazador de tarareos atinara a rescatarlas. Y que esa voz limpia, cálida y sutil habría sido un desperdicio como mera transmisora de sabiduría jurídica, la cualificación académica que ostenta. Por si quedara todavía algún escéptico, las cuatro nuevas piezas de este Icebergs, tercer trabajo y segundo EP del albaceteño, confirman ahora que lo de Jacobo no era una casualidad, sino un tesoro. Cada vez menos oculto, porque un material tan precioso no se le debe esconder a ningún oído con un mínimo de sagacidad. El resultado finalmente plasmado sobre las 45 revoluciones de este vinilo llega un paso más lejos, y hasta puede que dos o tres. Y en ese proceso de reinvención, o de sublimación, juega un papel decisivo un tipo muy distinto a Serra pero absolutamente complementario, puesto que con él comparte brillantez, humildad y apertura de miras. Responde al nombre de Juanma Latorre, es guitarrista y compositor de Vetusta Morla y este Icebergs señala su debut en una faceta, la de productor, que ojalá quiera seguir ejerciendo en muchas nuevas ocasiones. Asegura Jacobo que los icebergs siempre le fascinaron por su carácter misterioso, por la impredecibilidad de esa gran masa a la deriva de la que solo alcanzamos a vislumbrar un porcentaje minúsculo. Los icebergs no son tanto lo que parecen como lo que desconocemos de ellos, esa mole oculta bajo el océano inmenso que acaso nunca lleguemos a desentrañar del todo. Puede que con su propia música nos suceda algo parecido: Jacobo es un cantautor prolífico que va regalándonos sus canciones poquito a poco. Pero la belleza emergente de este iceberg albaceteño y universal no hace más que incrementar nuestra curiosidad ante el deshielo. Debajo de las aguas nos están esperando, sin duda, numerosos argumentos futuros para la emoción. Fernando Neira, El País.